Ritual opcional de matrimonio, este ritual
se efectúa antes de realizar la consagración del Matrimonio (4° del RSA),
preferiblemente en un día distinto. Este ritual es equivalente al matrimonio
realizado comúnmente en una iglesia ante un padre o un diacono. Por lo tanto,
si el hermano es casado ante la iglesia puede prescindir de este ritual
intermedio. Este ritual intermedio de matrimonio solo lo pueden hacer los
hermanos que hayan alcanzado el 3° del RSA y hayan expresado su voluntad de
hacerlo. También aquellos hermanos que no tengan pareja pero que hayan
expresado su profunda caridad en una legítima identificación con el prójimo.
Diacono: hermano(s),
este sacramento es la íntima unidad entre la Creación y la Redención, usted(es)
como contrayente(es) es/(son) quien(es) ejerce(n) el ministerio de este ritual.
Es por ello, que debo preguntarle(s): ¿es de su deseo y voluntad ejercer el
sagrado matrimonio? (Cada hermano debe responder afirmativamente). Siendo así,
yo pasare a ser testigo y usted(es) dirigirá(n) este sacramento. (En este
momento el Diacono le da la mano al hermano(a), le hace el signo de la cruz
como bendición, le brinda y explica brevemente el material y finalmente le da
un abrazo a cada uno).
Hermano(a) contrayente: Para
abrir la ceremonia vamos a escuchar la palabra del señor: (Juan 1:1-4) “In
principio erat Verbum, et Verbum era apud Deum, et Deus erat Verbum. Hoc erat in pricipio apud Deum. Omnia per ipsum facta sunt: et sine ipso
factum est nihil, quod factum est: in ipso vita erat, et vita erat lux hominum”. Hermanos,
quienes estamos aquí reunidos debemos meditar profundamente en el Alfa y el
Omega, este es uno de los santos nombres que Jesús escogió para revelarnos un
profundo misterio. (Se hace un minuto de silencio).
Hermano(a)
contrayente: Dios posee dentro de sí la posibilidad infinita del ser, y él
decidió ser el gran Yo Soy, él ordeno que se haga la creación y el hombre es su
mejor reflejo, lleno de luz y de vida, resplandeciendo de entre los demás
seres. Hombre y Mujer son complementarios, juntos pueden recrear el universo y
este es otro hermoso misterio. (Se hace una breve pausa). El Matrimonio
consagra y bendice toda creación que se geste en su seno. Jesús es el modelo
que guía nuestras conciencias y nuestra pareja /(el prójimo) es el reflejo de
nosotros mismos, causa y efecto de nuestros deseos, palabras y acciones. (Se
colocan ambas manos sobre la boca del estómago, mano derecha encima de la
izquierda).
Hermano(a)
contrayente: Busquemos en lo más íntimo de nuestro ser el modelo más idóneo que
nos complementa, el mejor reflejo que resuma y represente a todas las demás
posibilidades. Vital oportunidad para ser mejor persona (Se hace un minuto de
silencio, de aquí surgen dos opciones):
a)
Hermano(a) contrayente (Solo para los hermanos que poseen
pareja): Es una bendición del cielo que podamos tener a una pareja para
realizar esta misión. Dios en su infinito amor nos ha dado la oportunidad de
amarnos entre nosotros, de conformar un hogar y de convivir en familia. Por
ello, establecemos entre nosotros un pacto de alianza. (El hermano contrayente
continua leyendo): Yo, XXXXX, te tomo a ti, YYYYY, para que seas mi única
esposa, en los momentos buenos como en los malos, cuando tengamos prosperidad
como cuando tengamos necesidad, cuando gocemos de buena salud como cuando haya enfermedad,
en todo lo que te pueda ofrecer como en todo lo que pueda perder. Que seas tú,
Señor, el eje divino sobre el cual pueda girar la rueda de este matrimonio. (El
contrayente le pregunta a su pareja): ¿Me aceptas como tu Esposo? (Ella
contesta afirmativamente y luego replica): ¿Me aceptas como tu Esposa? (Él
contesta afirmativamente, luego le coloca el anillo en el dedo anular de la
mano izquierda diciendo “Alfa” y ella hace lo propio diciendo “Omega”). (El
hermano contrayente continua leyendo): (Efesios 5:31) “Por esto dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su
mujer, y los dos vendrán a ser una sola carne”. (Ambos pueden besarse en
los labios). (Luego, ambos contrayentes leen Mateo 19:6): “Así que no son ya más dos, sino una sola carne; por tanto, lo que Dios
juntó, no lo separe el hombre”.
b)
Hermano(a) contrayente (Solo para los hermanos que no
poseen pareja): (I Corintios 13:4-7) “La
caridad es sufrida, es benigna; la caridad no tiene envidia, la caridad no hace
sinrazón, no se ensancha; 5 No es injuriosa, no busca lo suyo, no se
irrita, no piensa el mal; 6 No se huelga de la injusticia, mas se huelga
de la verdad; 7 Todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo
soporta”. El mismo Jesucristo inició su ministerio convirtiendo las aguas
en vino en las Bodas de Caná. (Se hace una breve pausa). Meditemos en la
dualidad, en la polaridad, en la causa y el efecto, en nuestro reflejo, y en
como el dos se funde en el uno mediante el amor. (Mateo 5:43-44) “Oísteis que fue dicho: Amarás a tu prójimo,
y aborrecerás a tu enemigo. 44 Pero yo os digo: Amad a vuestros enemigos,
bendecid a los que os maldicen, haced bien a los que os aborrecen, y orad por
los que os ultrajan y os persiguen”. (Efesios 5:32) “Este misterio grande es: mas yo digo esto con respecto á Cristo y á la
iglesia”. (Se hace un minuto de silencio).
Hermano(a)
contrayente: En las sagradas escrituras se nos revela: (Juan 19:33-34) “Mas cuando llegaron a Jesús, como le vieron
ya muerto, no le quebraron las piernas. 34 Pero uno de los soldados le
abrió el costado con una lanza, y al instante salió sangre y agua”. Esta es
la misma agua que nos bendice al Bautizarnos y esta es la misma sangre que
bebemos en la Eucaristía. (Se hace una breve pausa). Acompáñenme a cerrar esta
hermosa ceremonia rezando entre todos el Padre Nuestro y el Ave María. (Se
hace). Hermanos, recordemos que: (Juan 1:5) “et lux in tenebris lucet, et tenebræ eam non
comprehenderunt”. Podemos retirarnos en paz. Amen.
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